Un grupo de niños que es visto en esta ciudad podría estar siendo utilizado por algunos adultos, pues se les ha visto caminar por las calles con cajas de plástico en los que ofrecen en venta diversos productos, como chile molido, cacahuates, entre otras cosas, por lo que se cree que son víctimas de explotación infantil.
Los niños de entre 10 y 12 años caminan por las calles y colonias, barrios y fraccionamiento visitando casa por casa para ofrecer sus productos, en diversas horas de la mañana y tarde, incluso a determinada hora se puede ver a alguno de ellos descansando en alguna sombra, bajo un árbol o sentados en las banquetas, sin saber con precisión en dónde comen o quiénes ven por ellos.
Los distribuyen en una camioneta
Algunos vecinos que los han visto comentan que se han percatado que los traen en una camioneta Van, los bajan y los distribuyen en diversos puntos de la ciudad, pero casi siempre hay un adulto cerca de ellos de manera discreta, a fin de que la gente no los identifique, lo que puede constituir un acto de explotación infantil.
No se tienen datos concretos del lugar de donde los traen ni de las circunstancias que rodean esta actividad, incluso los mismos niños no dicen mucho de por qué se dedican a la venta sin la compañía de algún adulto.
Uno de ellos fue entrevistado en días pasados sobre la calle 27, por el rumbo del barrio de Santa Lucía, y aseguró que sus padres lo mandan a vender para contribuir en el gasto de la casa, además comentó que él no forma parte del grupo de niños que son traídos de alguna comunidad.
Dijo tener ocho años de edad y que vive cerca de donde se platicó con él. Aseguró que sí está tomando clases en línea, pero que el lunes no tuvo y por ese salió a vender, pero que al día siguiente sí tenía clases.
De la misma manera se ha visto a otros niños ofreciendo diversos productos en algunas gasolineras de la ciudad, y cuando no les compran prefieren pedir limosna porque dicen que sus padres los regañarían si no venden lo que llevan.
También en el centro de la ciudad hay pequeños que ofrecen otros productos. Se mueven de un lado a otro buscando que les compren.
Por lo general sus productos se los ofrecen a los turistas que caminan en los alrededores del parque principal, pero casi siempre se muestran cuando no ven a ningún inspector de Espacios Públicos, pues cuando las autoridades municipales están en el primer cuadro se ocultan.